//EL DISCURSO / TEXTOS PROPIOS

Epifanía mundana

Epifanía mundana en el desvan. Una revelación, una iluminación, una apertura a un reino que se les niega a los seres sumergidos en el olvido. El desvan, fuera del paseo principal de la casa, la habitación de la casa reservada al inconsciente, a la naturaleza oculta de nuestra vida transfigurada en los objetos que se necesitan y se utilizan pero que pueden ocultarse suntuosamente y desdeñosamente al público.

Epifania mundana. La parte frontal de nuestras vidas. Fuera de la vista, fuera de la mente. Ojos que no ven, corazon que no siente. Ver para creer. Si un árbol cae y nadie lo presencia, ¿realmente se ha caído el árbol? En su momento bajo el foco aparecen criaturas extrañas, abisales, recicladas, en el espacio cuando lo iluminas, se han estado escondiendo allí, multiformes, alternativas, clandestinas, anómalas. El mundo no es un escenario para ellos, excepto cuando la iluminación revela algo loco, absurdo o extraño que sucedió, y casualmente estuvo aquí, ya que lo otro es una revelación en el costado, en el almacén húmedo, frío, mojado, en la apariencia liminal del carril olvidado. Y, sin embargo, cada sistema tiene un canal secundario para salvar las apariencias. La piedra angular es la piedra que se ha descartado pero que se utiliza para calibrar el proyector.

Para los vagabundos, los excursionistas merodeadores de la soledad y la soledad de los espacios vacíos, hay algo atractivo en esta presencia de una ausencia que de repente se revela no como tal ausencia sino como una presencia inexplorada. La otra es la aparición inesperada que desencadena, la epifanía de la luz que enciende la oscuridad en torno al silencio del paisaje abandonado. Entre bastidores. Detrás de escena, la fachada. La puerta trasera, una puerta al fin y al cabo. El canal alternativo del enunciado epigonal de la creación.

Proyecto de arte experimental. Montaje de un personaje sentado, con una mascara, con tonos invertidos, azules, grisaceos y negros, en formato circular

La soledad de los espacios vacios

Epifania mundana. Un rodeo burocrático que revela el sesgo inconsciente de los fenómenos. La seducción del pre-ser, eternamente señalado como la otra vida, el más allá y la alter vida, el punto de apoyo que ha sido anulado del fruto y queda fuera. La lavadora, los marcos, la parte trasera crucial. En lo mundano hay espacio para la luz. La incertidumbre es una revelación que aparece en medio del escenario peatonal de la vida cotidiana, en lo llamado mundano.

El medio performa la accion artistica. La imagen en movimiento encapsulada en un video busca nuevos formatos. La ciclica repeticion de un movimiento, como en un gif que aparece en tu telefono. */ GIF: Metafóricamente, el GIF también es un espacio mental. Hoy en día, este tipo de imágenes, perpetuas y cíclicas, están más presentes que nunca, gracias al formato GIF que permite enviar imágenes en bucle a través de aplicaciones móviles (los vídeos cortos en bucle también sirven). Pero también porque los dispositivos que utilizamos a diario tienen ese tipo de secuencia, las mismas animaciones de elementos activados de vez en cuando en una imagen bastante estática, que es la propia interfaz.

Proyecto de arte experimental. Montaje de un personaje con una mascara, con tonos invertidos, verdosos, grisaceos y negros, en formato circular, sujeta un tubo flexible que va de su cabeza a su estomago. De su mascara cuelgan retazos de correa.

En un contexto estático, una larga evolución. Epifania mundana que parte del arte que hagamos en el futuro surgirá tal vez a partir de estos elementos. Un momento, congelado. Tal es la naturaleza del GIF en bucle, hecho de puro movimiento pero atrapado en la repetición, como un fragmento de tiempo capturado en las manos de la imagen, una jaula de luz, forma y color, y un significado fugaz. Un momento detenido en el tiempo, congelado, para el eterno consumo y contemplación, espacio mental para la poesía visual. Una nueva sinfonía, una secuencia, una narrativa, no explícita, un acercamiento musical a las historias, cuentos o narrativas etéreas, vagas, no directas, por lo tanto no lineales. Quizás una nueva puerta para expresarnos en los nuevos tiempos. ///

El medio performa la accion artistica

Una trama subyace a su estructura, pero el juego está formado, como cualquier otra trama, lineal o no, por micromomentos, de la misma manera que un comediante divide su acto en pequeñas partes, haciendo vibrar cada chiste mediante la interacción. con el público.
De los muchos elementos que generó esta situación, sólo quiero centrarme en los micromomentos.
Mantienen el hilo de la historia, manteniéndonos conectados a través del paso del tiempo en la misma pantalla, aunque probablemente hay muchos elementos que se pueden señalar producto de esto, como las barras de progreso, avatares y compañeros, creo.

Quiero centrarme aquí en los intersticios de estas experiencias, los momentos de transición que desaparecen tan rápidamente que quedamos hechizados por el propósito para el que fueron diseñadas; para mantener nuestra atención mientras las máquinas hacen números detrás de ellos. Los micromomentos, tal vez y al principio, lo son todos.

Tu interacción con tus aplicaciones también se realiza a través de microsesiones realizadas a lo largo del día. y esa, esa es otra percepción de la imagen. Tu aplicación está hecha de micromomentos, una cadena de preguntas que debes responder con un intercambio, un clic o un deslizamiento. /Además: a – b = c , donde a es la imagen en movimiento revelada según las convenciones de películas, películas y vídeos; b está formado por convenciones tales como la narración, la carga literaria de las obras de arte; y c es lo que queda al restar este último al primero: puro movimiento. Tengamos en cuenta que, ciertamente, esto podría verse como nada más que un futurismo reciclado, un enfoque de «Marinetti va a Silicon Valley». Pero, como dijo Heraclitus Ethereum: «piensa antes de sincronizar». /

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